¿Quién ofrece garantías para legitimar los términos de un vocabulario controlado?
Las
funciones específicas de un vocabulario controlado, su implementación y sobre todo, el objetivo
por el cual se elabora, hacen de cada obra de control terminológico un texto
único. Estos aspectos determinan en gran medida, su estructura, sus
características y sus dimensiones. Una pregunta frecuente que se recibe es
acerca de cuándo un vocabulario controlado
debe convertir un término candidato en término aceptado. Expondré algunas modalidades
legitimadoras de la terminología.
Según
el uso que hacen los diferentes colectivos profesionales de la terminología y
de los vocabularios controlados, sobre todo aquellos que intervienen en la creación y desarrollo de éstos
van mostrando diferentes criterios a la hora de incluir términos en el listado
de voces preferentes. Algunos son especialistas en una ciencia o disciplina, lingüistas
y terminólogos, planificadores lingüísticos, traductores, documentalistas,
académicos, traductores o simples usuarios.
Al
momento de ingresar términos en un vocabulario, justificamos nuestras
decisiones sobre cierto tipo de garantía de calidad que entra en relación de tensión con otros
criterios, para poder determinar cuál será el término preferente de la fila de candidatos.
Haciendo el ejercicio de posicionarnos en diferentes roles según las particularidades
de un determinado VC, intentaremos ver quién
abre la puerta dando garantías para que un candidato sea aceptado en el
sistema de conceptos expresados en la terminología en cuestión.